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Casa de los Oramas
Quevedo

Esta residencia perteneció a la familia Oramas de Saá. Mateo y Catalina, legaron el solar a su sobrino e hijo, respectivamente, Mateo Delgado Oramas de Saá, quien procedió a edificar la vivienda en el tercer cuarto del siglo XVIII. Más tarde, fue heredado por sus cinco hijos, convirtiéndose en propietario único Pablo Oramas Quevedo tras la compra de las legítimas de sus hermanos.

En 1886 la residencia pasó a la propiedad de la familia Ruiz Borges. Estos la dividieron en dos por un muro que sirvió para repartir las legítimas. La casa se ubica en la llamada “Calle Estrecha” y su fachada principal da al antiguo callejón de las Blasas.

 

Antonio Ruiz Suárez (1841-1915)

 

Desde temprana edad estuvo interesado por los estudios y el sacerdocio. A los 16 años comienza su carrera eclesiástica bajo la tutela de un fraile de la Orden Seráfica. Pero este sentimiento chocaría con aquellos que comenzó a tener por una amiga de su infancia, Elena, que a la larga se convertiría en su mujer. Se matricula en el Instituto de enseñanza en La Laguna en 1861 y, posteriormente, ingresó en el Seminario de Canaria en 1863, pero ante el peligro de contagio de enfermedad en este, toma el cargo de director del Colegio de Internos de La Laguna. Vuelve a ingresar en el Seminario, pero este cierra debido a la revolución de 1868, momento en el que ya no volvería.

 

En este mismo año contrae matrimonio con Elena y tiene diez hijos, de los que sobreviven a él siete. Pasó 28 años impartiendo enseñanza, hasta que en 1896 muere su esposa. Tras este suceso ingresa como interno en el Seminario Diocesano de La Laguna y en 1897 se ordena sacerdote, practicando su vocación en La Guancha y en Icod de los Vinos.